La aromaterapia es una práctica ancestral que utiliza los aceites esenciales para mejorar el bienestar físico, emocional y mental de las personas. ¿Qué la distingue de una simple fragancia ambiental? En estética Abril te lo contamos.

Beneficios de la aromaterapia

La esencia de esta terapia radica en el uso de aceites esenciales, que son extractos concentrados de plantas. Estos aceites se obtienen mediante procesos de destilación o prensado en frío de flores, hojas, tallos, raíces y otras partes de las plantas. Cada aceite esencial tiene propiedades únicas que puede tener beneficios terapéuticos como:

Relajación y reducción del estrés: muchos aromas tienen propiedades relajantes que pueden ayudar a aliviar el estrés, liberar la tensión acumulada y promover la relajación.

Alivio de dolores y malestares: ciertos aceites esenciales tienen propiedades antiinflamatorias y analgésicas que pueden ayudar a aliviar dolores musculares, dolores de cabeza, tensiones y otros malestares físicos.

Equilibrio emocional: algunos aceites se utilizan para estimular el estado de ánimo y ayudar a aliviar síntomas de ansiedad o depresión. Se cree que la aromaterapia puede ayudar a equilibrar las emociones y promover un estado mental más positivo. 

Mejora del sueño: esencias naturales como la lavanda, la manzanilla y el sándalo, se emplean para favorecer un sueño tranquilo y mejorar la calidad del descanso.

Estimulación y concentración: ciertos aromas, como la menta, se utilizan para mejorar la concentración y el enfoque.

Mejora de la respiración: aceites como el de eucalipto y el de mentol se utilizan para facilitar la respiración y aliviar la congestión nasal.

Aromatización de espacios: además de aplicarse directamente sobre la piel o inhalarlos, las esencias naturales también se utilizan para aromatizar ambientes y crear un entorno agradable.

En la zona de espera suelo poner en primavera y verano naranja, lemongrass, mandarina y en invierno canela, orquídea, violeta, bergamota…

El primer paso crucial es elegir los aceites esenciales adecuados para que después puedan ser aplicados con diversos métodos: 

Difusores: 

Los difusores son dispositivos que dispersan partículas finas de aceite en el aire, permitiendo que los aromas llenen una habitación. Pueden ser eléctricos, de vela o basados en la evaporación. 

Inhalación directa: 

Puedes inhalar directamente el aroma de un aceite esencial aplicando unas gotas en tus manos, frotándolas y luego inhalando profundamente. También puedes inhalar directamente de un frasco de aceite esencial.

Baños aromáticos: 

Añadir unas gotas de aceite esencial a un baño caliente puede proporcionar una experiencia relajante y beneficiosa. Asegúrate de mezclar bien el aceite en el agua antes de sumergirte.

Masajes: 

La aromaterapia también se puede incorporar a través de masajes. Los aceites esenciales se mezclan con un aceite portador y se aplican sobre la piel durante un masaje, permitiendo que los beneficios de los aceites se absorban a través de la piel. Los utilizo en los rituales y siempre doy a testar el aroma a la clienta.

Compresas: 

Se pueden aplicar compresas con esencias naturales en áreas específicas del cuerpo para aliviar dolores localizados o tensiones musculares.

Uso en velas o saunas:

Algunas personas incorporan aceite en velas aromáticas o pueden ser utilizados en saunas para disfrutar de sus beneficios mientras se relajan.

 

Despierta tus sentidos con los aceites esenciales en Estética Abril.

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